Vistas de página en total

lunes, abril 11, 2016

Adelgazar viajando

Y así es cómo volví a Chile

miércoles, septiembre 30, 2015

Llega un momento que no quieres encariñarte con nadie, ni contigo mismo. Y eres feliz.

viernes, marzo 27, 2015

Siempre vuelan los de más peso

Hoy no voy a escribir.

Porque en este arcoiris tan frágil que estaba viviendo estos últimos días, le ha aparecido un enorme agujero negro, de esos que no se tapan ni con la mejor gama de colores verde esperanza que podamos imaginar. Hoy es un día triste, y por lo tanto, quiero dedicartelo a ti, una de las personas con la mirada más limpia y más verdadera que he conocido, uno de los chavales que tenía la sonrisa más embaucadora del planeta, eras algo bueno, que inspiraba de todo menos sentimientos negativos, y eso es tan difícil de encontrar en estos tiempos donde ya no sólo es difícil vivir, sino que también se está convirtiendo en dificultad el sobrevivir.

Te fuiste, para volar, alto - supongo -, pero al fin y al cabo.


V
  O
    L
      A
         R

martes, febrero 24, 2015

Que mi cuerpo no para de notar


que tu alma conmigo siempre está...


y que nunca de mi se apartará.

miércoles, febrero 11, 2015

Sabes qué pasa? que todo esto no es más que una simple exageración de algo bello y real.Por lo tanto, voy a dejar correr las hipérboles de mi vida y empezar a vivir en ríos de sonrisas y en vuelos de aves negras, carroñeras, de esas que se comen hasta el último ápice de carne muerta.Porque muerto estuve. Y me comiste, en realidad, fue tu indiferencia la que me mató, y fueron tus labios los que me comieron estando cerrados tanto tiempo.Parece difícil explicar a la gente que nunca ha vivido algo similar, que hay veces en la vida, que puedes echar tanto de menos que sólo tienes ganas de llorar. Ganas, por decirlo alguna manera, porque yo ni siquiera eso, no tenía ni 'ganas' de tener 'ganas'. Al final, te acabé ganando.Pero soy igual de tozudo y estúpido que antes, sigo teniendo mis juegos donde nadie gana, porque no dejo jugar, sigo teniendo este estilo de vida envidiable, que de vez en cuando miro desde lo más alto y pienso: ¿que más quieres en esta puta vida, cabronazo?.Mis ojos han podido contemplar las mejores noches del mundo, las mejores estrellas, han divisado aquellas constelaciones del Sahara que comentábamos antes de irnos a dormir, he palpitado al estar bajo San Pedro de Atacama, mientras su cielo me hablaba. Me he guardado demasiadas cosas, no te he enviado ciertos e-mails ni tampoco te he contestado a las dos últimas llamadas, pero es que si lo hago, ya no pienso que vaya a perder en un juego, pienso que voy a seguir echándote de menos toda la vida.Porque al fin y al cabo, hubo un tiempo, que decidimos ser vida, de forma recíproca, no lo recuerdas mi amor?.

jueves, enero 29, 2015



"moi aussi tu me manques mon tendre 

amour..."



miércoles, enero 21, 2015

Cree mi espacio en tu interio

He aprendido a quererte para siempre, pero de otra manera.
Sé que es difícil que lo entiendas, y más, después de todos los acontecimientos que nos rodearon desde nuestro punto inicial, pero es así. Te sigo queriendo, y no por qué no lo haya intentado ahogar, este amor es del diferente, del que me encantaría que fluyera para toda la vida, sabiendo que ya no somos, pero fuimos, un pasado que cada vez me gusta más, que ya no me atormenta, porque ya he aceptado que no me voy arrepentir nunca más de haberte vendido mi vida al cien por cien.
Es triste.
NO, me dije en silencio.
Más triste son aquellos que guardan el todo para siempre, y más triste son aquellos que guardan.
Yo hace tiempo ya que ni guardo ni me quedo en silencio, tampoco uso los siempre para nada, para mi ya no existe nada que sea para 'siempre', recuerda que tú siempre me criticabas mi abuso hacia ellos constantemente?.
Hoy es hoy, y mañana puede que seamos pólvora cantada por Leiva, me da igual, pero he decidido que te voy a querer cerca de mi vida, muy pronto, aún a sabiendas que tus labios ya no son 'tus' sino 'sus', y que 'nuestros' motes ya no son nuestros, sino son de otros, pero y qué? 
He vomitado mil veces desde aquella noche, me he clavado estacas a modo de novela vampiresa día tras días, y no me ha servido de nada crucificarme en este anclaje pasajero que cada vez impedía más mover nuestro velero, aquél con el que juré venir a verte algún día. 
Ahora me despierto y sonrío al saber que todo te va bien, que sigues siendo tú, que no has cambiado nada para mí ni para los tuyos, que tu larga melena continúa haciendo de las suyas, seduciendo y dejándose querer, como algún día lo hiciste conmigo. Hoy ya no te amo, pero te quiero más que a nada.
Y no me da miedo proclamarlo a los cuatro vientos, para nada, el miedo ya no existía en mi, pero ahora más que nunca lo he convertido en un fantasma de sábanas blancas y de larga cadena en forma de bola.
Mi bola, tú, yo, bola, todo, siempre.

sábado, diciembre 20, 2014

Hoy me quité el collar que más me ha pesado en mi vida

Es diciembre, y se acerca la Navidad. Esa que nunca vivimos y que tampoco viviremos.
Hoy me quité ese collar que tanto me ha acompañado en estos últimos dos años de mi vida y que tanta felicidad me ha dado.

Creo que llegó un momento que había aspirado demasiada negatividad, y hoy cuando me lo quité no solo pude ver que había adelgazado al pesarme en mi vieja báscula ubicada en mi cocina, sino que además, me sentí más libre y más ligero. 

Por eso, y por una noche de reclutamiento sexual, pensé que empezaba a dejarte de pensar y me puse más contento que nunca. Simplemente porque era un jueves cualquiera, de una noche cualquiera, en la que sabía que nada iba a ocurrir, y ocurrió, algo nuevo pasó en mi vida, y eso os aseguro, mis mejores lectores lo sabrán, que hacía tiempo que pensaba en no pensar en nada parecido a lo que estáis pensando.

Y ya no os hablo de las ilegalidades que hicimos, ni las risas que lanzamos al aire sin acordarme de nada, ni tampoco de la deliciosa pizza que compartimos en aquella casa de árbol, ni las bragas de color negro que entre-mordí con mis colmillos, os hablo de algo más general, de algo más intrínseco, de algo más natural, os hablo de fluir sin pedir nada a cambio.

Y todo esto, repito, ha sido así, natural, todo lo contrario a tu despedida. 


lunes, octubre 27, 2014

Y todo lo que fue, y todo lo que es, y todo lo que será.

Aún recuerdo el escrito que te hice aquella noche en que esperaba en el embarcadero un pequeño bote que me llevara a Koh Tao.
Recuerdo que fue la primera vez en mi viaje que empecé a necesitarte de verdad.
Me dí cuenta que estaba perdiendo el tiempo, y que a la vez ganaba felicidad, y era muy extraño porque yo te quería con la condición que fueras incondicional. Y (no) lo fuiste.
Bueno,

A VECES.

Realmente creo que el juego más bonito es ese de no entenderse pero fundirse en semi abrazos desnudos que acaban con pasión, besos húmedos y caricias más que cariñosas.
Lo fuimos todo pensé, y ahora, tan y tan lejos, que no sé a qué árbol arrimarme. 
Todo había cambiado en mi vida, menos una cosa. 
Ese latido constante al recordar tu nombre, ese miedo al no recuperar nunca jamás eso que por mucho que explique a mis conocidos no entienden, eso que solo tú y yo (creo) hemos vivido y nunca nadie lo podrá llegar a dimensionar.
A veces pienso en ti, en Barcelona, en esas calles estrechas que algún día paseamos agarrados de la mano, y ahí me viene (mi vs tu) y lo quiero juntos, y lo anhelo sin haberlo vivido, y algo me dice que estás, que eres presente y que no conjugas ningún pretérito pasado.
Es todo realmente una corriente incontrolable, siempre nos decíamos que eramos terremotos sin riesgo, es decir, que eramos corrientes superfluas de aire chocando e intentando hacer el amor en el aire, sin hacernos daño.
Yo te callaba la voz, contra el cristal, te echaba de menos y necesitaba tu libertad. Nos dejaremos si nos queremos dejar, pero es que yo quiero ahora tus cadenas de sal, esa sal que se deshace como estas lágrimas al recordar que fue, que es y que todo será.